Convocatoria

Diez años han pasado desde la creación de ADAL[2] por un grupo de jóvenes investigadores para constituir una red de intercambios en torno a los países latinoamericanos y los discursos que emanan de ellos. Durante sus diez años de existencia, la asociación ADAL ha organizado tres jornadas de estudio (2009, 2010, 2013), dos coloquios internacionales (2014, 2017) y una cuarentena de seminarios sobre el análisis de los discursos políticos y mediáticos en América Latina. Para celebrar este aniversario, la asociación ADAL se propone dar una mirada crítica a los últimos veinte años de discursos que han circulado y circulan en la escena política y mediática latinoamericana durante un coloquio organizado en la Universidad de Lille.

 

En las dos últimas décadas, la región latinoamericana ha experimentado transformaciones importantes y se consolidó como uno de los actores de la política y la economía a nivel mundial: creación de la CELAC[3] y de UNASUR[4]. Se puede mencionar especialmente la emergencia de líderes de izquierda y la consolidación de gobiernos con ideales progresistas, lo que ha permitido el surgimiento de un nuevo socialismo propio al continente latinoamericano que Hugo Chávez llamaba “socialismo del siglo XXI”, retomando el concepto de Heinz Dieterich Steffan (1996). Esta nueva tendencia socialista dio lugar a la aparición de formaciones políticas – al margen de las existentes más tradicionales y conservadoras –, representadas cada una por una figura carismática y popular: el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) de Hugo Chávez, la Alianza País de Rafael Correa en Ecuador, el Movimiento al Socialismo (MAS) de Evo Morales en Bolivia, el Frente para la Victoria de Néstor Kirchner y Cristina Fernández en Argentina, el Partido dos Trabalhadores de Lula da Silva en Brasil, entre otros. Hemos asistido así a la renovación de la política y la aparición de nuevas prácticas discursivas. Ejemplo de ello es el establecimiento de formas específicas del discurso político, tales como el uso del “storytelling” o la “narración”, es decir la construcción de relatos cuyo objetivo principal es crear un sistema de complicidad/concertación entre el locutor político y sus interlocutores. Estas prácticas se manifiestan igualmente mediante la aparición de medios de comunicación adaptados a esta nueva manera de comunicar en política: por ejemplo los programas de televisión Aló Presidente (creado por Hugo Chávez en Venezuela) o los Consejos Comunales de Gobierno de Álvaro Uribe en Colombia[5].

 

Esta fase de la política latinoamericana se conoce como “giro a la izquierda”,  aunque este cambio de dirección no se evidenció en todos los países de la región (especialmente en México y Colombia). En efecto, muchos países de América Latina experimentaron este movimiento de ruptura, símbolo del descontento, de la insatisfacción social y las inquietudes de la población frente a la privatización de los recursos naturales, las empresas nacionales, etc. Esta transformación se vio cristalizada en la elección de personalidades políticas que encarnan diferentes aspectos de esta izquierda emergente: políticas más sociales favorables a la redistribución de la riqueza y a la nacionalización de la economía y afirmación de una identidad latinoamericana, basada en ideales transmitidos por un discurso político que se pretendía renovador. Estos nuevos actores se afirmaron social y culturalmente al margen de las representaciones y las mediaciones tradicionales.

 

Sin embargo desde 2010, como lo comenta el periódico Le Monde[6], los movimientos de izquierda que se encontraban en el poder acumulan una serie de reveses y atraviesan procesos de estancamiento que se reflejan en las urnas y dan cuenta de un nuevo giro, esta vez conservador, contrario a los proyectos de izquierda construidos por los gobiernos del “socialismo del siglo XXI”. Este giro se caracteriza por la llegada a la escena política latinoamericana de figuras políticas de orientación neoliberal que reclaman un “aire de modernidad” y favorecen políticas que privilegian al sector privado e implementan medidas sociales y políticas de austeridad en el plano económico. Podemos citar el fin del kirchnerismo en las presidenciales de 2015 en Argentina y la elección del candidato de centro-derecha liberal Mauricio Macri; el rechazo de un cuarto mandato de Evo Morales a través de un referendo propuesto por él mismo en 2016, quien fue finalmente autorizado por el Tribunal Constitucional para postular a un nuevo mandato; o la elección en 2016 del candidato de centro-derecha liberal Pedro Pablo Kuczynksi en Perú. En Venezuela, la oposición se instala mayoritariamente en la Asamblea en las elecciones legislativas de 2015, aunque el chavismo resurge en las elecciones a la Asamblea constituyente de 2017 y aparece revitalizado luego de las elecciones regionales de octubre de 2017. En Brasil, Dilma Rousseff es destituida en 2016 por el senado, acusada de haber maquillado las cuentas públicas. Las controversias jurídicas alrededor de esta decisión han agitado el debate público, oponiendo a los que defienden la legitimidad constitucional del proceso y a los que denuncian un “golpe de estado parlamentario” orquestado por la oposición y el vicepresidente Michel Temer, él mismo acusado de corrupción. Desde que está en el poder luego de la destitución definitiva de la presidenta en agosto de 2016, Temer ha constituido un gobierno muy conservador en concertación con los intereses de las élites económicas brasileñas. En Chile, en decenas de municipalidades la derecha salió victoriosa en las elecciones locales – incluso si la derecha y la izquierda atraviesan un período de crisis y se ven fragmentadas –, lo que ha dado como resultado la elección del candidato de derecha Sebastián Piñera, quien dice representar una “derecha renovada y liberal”, lejos de toda herencia de la dictadura de Pinochet. Finalmente, en Ecuador, la llegada de Lenin Moreno, miembro del partido Alianza País fundado por Rafael Correa, adopta un programa político de austeridad que se aleja de las políticas socialistas establecidas por su predecesor.

 

En este contexto, este coloquio se interesará específicamente en la evolución del discurso político latinoamericano entendido en un sentido amplio, es decir que incluye tanto los discursos de los actores políticos e institucionales, como las diversas formas de comunicación política y pública, los discursos mediáticos o los discursos militantes, entre otros. Más concretamente, se tratará de analizar la manera en la que el discurso político se articula y las modalidades enunciativas especificas desplegadas por cada locutor para posicionarse “a la izquierda”, “a la derecha” o en el centro del espectro político; o, por el contrario, para evitar posicionarse.

 

De la misma manera, este coloquio se interesará en el rol de los discursos mediáticos: ¿cómo los medios de comunicación han dado cuenta de la emergencia de una “izquierda” y/o de una “derecha en cada país? ¿Qué papel juegan medios como el canal de televisión Telesur o los diarios de gran cobertura nacional? ¿A qué objetivos responde la emergencia de los medios alternativos en Internet, como por ejemplo el sitio de información Las Dos Orillas en Colombia o la Red Popular en Argentina? Esta última surge justamente como un canal de difusión de alcance internacional cuyo objetivo es promover un discurso alternativo al del pensamiento económico único. La creación en julio de 2017 de la red social argentina Facepopular, que se presenta como un frente alternativo al establecimiento y cuenta ya con miles de miembros tanto en Argentina como en otros países latinoamericanos, cuestiona igualmente el lugar de los medios alternativos en la escena político-mediática actual. De hecho, convendrá explorar la evolución de la vida política latinoamericana de las últimas décadas a través del prisma de los medios tradicionales y los nuevos medios, como las redes sociales ampliamente utilizadas por los actores políticos latinoamericanos.

 

Este coloquio será así la ocasión de interrogarnos sobre la América Latina de estos últimos veinte años y, especialmente, sobre las diferentes maneras de interpretar los dos fenómenos anteriormente mencionados: la ruptura con las políticas neoliberales que representa la llegada de los gobiernos y las políticas situadas a la izquierda del espectro político y el retorno a las políticas conservadoras y a los valores de la derecha. ¿Cómo, a través del discurso y con la ayuda de procedimientos enunciativos, los locutores políticos y mediáticos latinoamericanos constituyen y caracterizan cada “giro”? ¿Podemos hablar de la emergencia o del resurgimiento de una “derecha renovada y liberal” o se trata de una derecha inscrita en la idiosincrasia específica de cada país con sus características propias? ¿Qué rol juegan los medios frente a cada uno de estos “giros” y en la transición de un giro al otro? ¿Por medio de qué elementos discursivos los diferentes eventos políticos son pensados, diseñados y categorizados? Podremos interrogarnos igualmente sobre las categorías mismas de “izquierda” y “derecha”: sobre su sentido, su historia y sobre su pertinencia en el contexto histórico y político del continente latinoamericano.

[1] Cartografía de Christophe Chabert, cartógrafo, ilustrador, redactor https://blogs.mediapart.fr/cchabert/blog/141117/amerique-latine-droite-toute
[2] Análisis de Discursos de América Latina: http://www.adalassociation.org/
[3] Comunidad de Estados Latinoarmericanos y del Caribe: http://www.sela.org/celac/
[4] Unión de Naciones Suramericanas: www.unasursg.org
[5] Aún si este último no hace parte de los gobiernos progresistas anteriormente mencionados.
[6]http://www.lemonde.fr/ameriques/article/2016/09/02/revers-en-serie-pour-la-gauche-en-amerique-latine_4991776_3222.html